China anunció exenciones fiscales para estimular el crecimiento de su industria de semiconductores luego de las sanciones de Estados Unidos que alarmaron al gobernante Partido Comunista al cortar el acceso a chips de procesadores estadounidenses para el gigante tecnológico Huawei y algunas otras empresas.

(AP)-Los líderes declararon que la aceleración de los esfuerzos para transformar China en una “potencia tecnológica” autosuficiente será la principal prioridad económica de este año después de que la guerra arancelaria con Washington destacó su dependencia de los componentes estadounidenses para teléfonos inteligentes y otras industrias que Beijing quiere desarrollar.

Los fabricantes de chips pueden importar maquinaria y materias primas libres de impuestos hasta 2030, anunciaron el Ministerio de Finanzas y otras agencias. No dijeron el monto de la subvención a los fabricantes que podría representar.

Beijing ha invertido mucho en las últimas dos décadas para construir una industria de chips china, pero sus fabricantes de teléfonos inteligentes y otras tecnologías aún dependen de Estados Unidos, Europa y Taiwán para sus componentes más avanzados.

El entonces presidente Donald Trump cortó el acceso de Huawei Technologies Ltd. a chips de procesadores estadounidenses y otras tecnologías en 2019 en una pelea por las ambiciones industriales de Beijing.

El año pasado, Trump endureció las restricciones al prohibir a los proveedores globales utilizar tecnología estadounidense para fabricar chips para Huawei. Eso amenaza con paralizar su negocio de teléfonos inteligentes, que fue el vendedor mundial número uno a principios de 2020, pero ha abandonado las cinco principales marcas.

Los analistas políticos esperan pocos cambios en la posición de Estados Unidos bajo el presidente Joe Biden, quien sucedió a Trump en enero. El fundador de Huawei, Ren Zhengfei, dijo en febrero que es «muy poco probable» que se levanten las sanciones.

Los chips de procesador y otros semiconductores son la mayor importación individual de China, con un total de más de $ 300 mil millones al año.

Según la última medida, la maquinaria y las materias primas «que no se pueden producir o cuyo rendimiento no puede satisfacer la demanda» estarán exentas del impuesto a la importación, dijo el gobierno.

Eso se aplica a fotorresistentes, máscaras, almohadillas y líquidos para pulir, cristales y obleas de silicio, materiales para construir salas blancas y otros equipos de producción, según el anuncio.